El Poder del Voluntariado: una conversación con José Luis Jácome
El Poder del Voluntariado: una conversación con José Luis Jácome
Nos honra contar hoy con la presencia de José Luis Jácome, Coordinador de Voluntariado de la Fundación Progressio Ecuador, y sin el cual, esto no estaría sucediendo. Diplomático de carrera y profundo conocedor del trabajo en cooperación internacional, José Luis ha dedicado gran parte de su trayectoria profesional al diseño, implementación y fortalecimiento de programas sociales enfocados en el desarrollo humano y la equidad. Su liderazgo al frente del voluntariado ha sido esencial para consolidar una red diversa de colaboradores comprometidos con los valores de la Fundación.
A lo largo de los años, su visión estratégica y su capacidad para movilizar talento humano han permitido que la Fundación Progressio Ecuador expanda su alcance, genere alianzas significativas y responda con eficacia a los desafíos sociales en distintas comunidades del país. En una era marcada por la transformación digital y la urgencia de modelos de desarrollo sostenibles, su trabajo representa un ejemplo de cómo la cooperación y la participación ciudadana pueden convertirse en motores reales de cambio.
El Rol del Voluntariado en Progressio Ecuador
Para quienes aún no conocen la labor de Progressio Ecuador, ¿nos puedes contar un poco más sobre la Fundación? ¿Cuáles son los enfoques de Progressio? ¿Cómo contribuye la fundación al ODS17?
Nacimos en plena pandemia, impulsados por la incertidumbre y ante la expectativa de estar viviendo un hecho disruptivo que, en ese momento, daba claras señales de que el mundo tal como lo conocíamos estaba por cambiar.
Tras un año de intercambio de ideas, análisis de la coyuntura mundial y revisión de distintos escenarios, nos identificamos con el arquetipo del panal de abejas. Los sistemas colaborativos de la naturaleza parecían ofrecer respuestas a los grandes desafíos de la nueva normalidad, representando una alternativa viable para el cumplimiento de los objetivos de la Agenda 2030, en particular el ODS 17: la construcción de alianzas.
Nada podía lograrse sin la participación de todos, y todo carecía de sentido sin una visión intergeneracional, intercultural e interseccional. “Que nadie se quede atrás” fue el llamado, y la construcción de alianzas, el camino que consideramos nos conduciría hacia un futuro mejor.
¿Cómo describirías el papel del voluntariado dentro de la organización? ¿Cuáles son los principales proyectos en los que los voluntarios pueden involucrarse y qué impacto tienen en las comunidades?
Agradecemos profundamente a todas y todos los voluntarios que nos han acompañado desde el inicio. En la Fundación Progressio Ecuador, todas las personas somos voluntarias. El sistema de voluntariado digital de Naciones Unidas ha sido clave para nuestro nacimiento y fortalecimiento. Con su apoyo, hemos ejecutado veinte proyectos junto a más de sesenta voluntarios digitales. Gracias a su generosidad, desarrollamos planes de sustentabilidad, bases de datos, redes sociales y nuestra web. También realizamos estudios sobre economía popular, turismo sostenible y comunidades europeas en Ecuador. Creamos redes de solidaridad como Syncronia y elaboramos un análisis integral sobre voluntariado y RSE. Actualmente, nuestra acción voluntaria se realiza completamente en el formato digital. Seguimos alineando nuestra estructura a la Ley Orgánica de Acción Voluntaria del Ecuador y su Reglamento. ¡El voluntariado digital transforma realidades!
En tu experiencia, ¿qué cualidades y habilidades debe tener un buen voluntario?
Un voluntario es alguien que elige vivir con propósito, haciendo de la solidaridad una forma de estar en el mundo y entendiendo que el bienestar colectivo también construye el propio. Más allá de "ayudar", acompaña procesos con empatía, escucha y siente profundo respeto por las realidades diversas que enfrenta. Tiene la capacidad de trabajar en equipo, adaptarse a diferentes contextos y comunicarse con sensibilidad, generando lazos genuinos. Actúa con iniciativa, creatividad y humildad, sabiendo que cada experiencia es una oportunidad de aprendizaje mutuo. Su compromiso no es pasajero, es constante y se fortalece con formación y reflexión. Así, el voluntariado se convierte en una herramienta de transformación social que inspira, moviliza y construye esperanza desde lo humano y lo estratégico.
Desafíos y Oportunidades
¿Cuáles han sido los mayores desafíos al dirigir el programa de voluntariado y cómo los han superado?
El voluntariado se diferencia claramente del voluntarismo por su enfoque sostenido, planificado y con sentido estratégico. Mientras el voluntarismo puede partir de buenas intenciones, suele carecer de continuidad y de una conexión real con procesos transformadores. En la Fundación Progressio Ecuador creemos en un voluntariado que construya impacto, pero también vínculos duraderos. Por eso, hemos dedicado años a identificar espacios donde la participación voluntaria beneficie a ambas partes. Esta experiencia nos llevó a consolidar el voluntariado digital como la forma más coherente con nuestra visión: construir relaciones a largo plazo con nuestros voluntarios, impulsar sistemas colaborativos y aportar activamente al ODS 17. Apostamos por alianzas sólidas con actores diversos —empresas, instituciones y personas— y otras organizaciones no gubernamentales que, como nosotros, creen en el poder de trabajar en comunidad por un futuro sostenible.
La fundación busca expandir su impacto a nuevos países. ¿Cómo puede el voluntariado contribuir a esta expansión y qué oportunidades ves en este proceso?
Desde sus primeros pasos, la Fundación Progressio Ecuador ha trabajado con una visión global, construyendo redes desde lo digital, en plena pandemia, cuando lo virtual se volvió nuestra principal herramienta de encuentro. Eso nos permitió nacer como una comunidad diversa, con aliados, voluntarios y amigos en América Latina, Europa y Estados Unidos. Uno de nuestros mayores aprendizajes ha sido entender que el voluntariado no es sólo apoyo, sino la esencia misma de nuestros sistemas colaborativos. Como en un panal de abejas, cada persona suma desde su lugar, y juntas tejemos procesos que trascienden fronteras. En este camino hacia la expansión internacional, el voluntariado digital es clave para abrir puertas, generar alianzas y activar iniciativas locales con impacto global. Nos ofrece la oportunidad de seguir creciendo como una comunidad comprometida con la sostenibilidad, la paz y la construcción colectiva de un mundo más justo.
En un contexto global cada vez más digitalizado, ¿cómo visualiza el papel del voluntariado virtual en el fortalecimiento del trabajo social y comunitario? ¿Qué estrategias está implementando Progressio Ecuador para integrar esta modalidad, y cómo valora el apoyo de herramientas tecnológicas e inteligencia artificial en el funcionamiento y proyección de las organizaciones sociales?
En un contexto global cada vez más digitalizado, el voluntariado virtual se consolida como un espacio natural y necesario para canalizar la solidaridad y fortalecer el trabajo social y comunitario. Desde una perspectiva estratégica, y en sintonía con los avances de la cuarta revolución industrial, esta modalidad permite superar barreras geográficas, optimizar recursos y ampliar el alcance de las iniciativas sociales. En Progressio Ecuador entendemos que la transformación digital no es solo una herramienta, sino una oportunidad para repensar la acción social con criterios de innovación, sostenibilidad y cooperación global. Por ello, hemos incorporado el voluntariado digital como eje central de nuestra estructura organizativa, articulando redes de colaboración en distintos países y facilitando la participación de profesionales y ciudadanos comprometidos desde cualquier lugar del mundo. Valoramos profundamente el papel de las tecnologías y de la inteligencia artificial como aliadas para gestionar conocimiento, mejorar la comunicación y proyectar nuestras acciones con mayor impacto. Este enfoque nos permite no solo adaptarnos a los desafíos contemporáneos, sino también contribuir de manera efectiva a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente en lo relacionado con la construcción de alianzas, la inclusión digital y la sostenibilidad de largo plazo.
Inspiración y Llamado a la Acción
¿Hay alguna historia de voluntariado que te haya marcado especialmente y que quisieras compartir con nosotros?
Si es posible, prefiero contar una historia personal, porque creo que es importante cuidar la privacidad de las personas con las que he tenido la oportunidad de colaborar.
Comencé en el voluntariado hace 22 años, en Roma, Italia. Fue una experiencia que me marcó profundamente y que despertó en mí el deseo de hacer algo más. Al volver a Ecuador, noté que no había una legislación que reconociera ni respaldara el trabajo voluntario, y eso me llevó a escribir mi tesis de doctorado en Jurisprudencia sobre el tema, entre 2002 y 2005.
Desde entonces, he dedicado gran parte de mi vida a impulsar la idea de que Ecuador necesita una Ley, un Sistema y un Plan Nacional de Voluntariado. Durante estos años he participado en foros, espacios de diálogo y procesos colectivos, tanto en el país como en el exterior, convencido de que el voluntariado necesita una base sólida para crecer y sostenerse en el tiempo.
Hoy, dos décadas después, me da mucha alegría ver que ese sueño se ha hecho realidad. Gracias al trabajo conjunto de muchas personas y organizaciones —incluidas algunas internacionales que aportaron directamente al proceso—, Ecuador cuenta con una Ley Orgánica de Acción Voluntaria. Para mí, es una muestra clara de que cuando hay compromiso y perseverancia, los cambios sí son posibles.
Para quienes están interesados en sumarse como voluntarios, ¿cómo pueden hacerlo y qué mensaje les darías para animarlos a dar el primer paso?
Los voluntarios deben conocer sobre sus derechos y obligaciones. Es importante que previamente a tomar esta importante decisión conozcan la legislación sobre el voluntariado local; en el caso ecuatoriano la Ley Orgánica para la Acción Voluntaria y su Reglamento. Es una excelente idea fortalecer la práctica del voluntariado digital porque se orienta hacia las nuevas dimensiones del desarrollo, en este campo la mejor opción siempre será el sistema de voluntariado en línea de la Organización de Naciones Unidas: https://www.unv.org/es/hazte-voluntario
Hoy, más que nunca, queremos agradecer a José Luis Jácome por abrirnos las puertas de Progressio Ecuador y, con ellas, las puertas de la transformación social. Su liderazgo nos recuerda que el voluntariado no es simplemente dar, sino construir juntos un futuro que merece ser vivido. Gracias a su visión y entrega, personas con ganas, voluntad y sueños, como muchos de nosotros, hemos encontrado un espacio donde podemos aportar, crecer y dejar una huella real en la sociedad.
Cada historia, cada proyecto y cada paso dado en esta Fundación es también reflejo de su incansable compromiso por hacer del mundo un lugar más justo y humano.
Gracias, José Luis, por creer que la cooperación es el camino, y por demostrarnos que, cuando el corazón y la acción se unen, no hay frontera que limite lo que podemos logra
🔹 Si quieres ser parte de Progressio Ecuador y contribuir con tu talento y compromiso, visita nuestra página web, síguenos en redes sociales; y, busca nuestras convocatorias en el sistema de voluntariado digital de la ONU. ¡Tu ayuda puede marcar la diferencia!
Entrevista realizada por Reyes González, ONUVD.