La cultura como lenguaje del progreso: una conversación con Carolina Varela
La cultura como lenguaje del progreso: una conversación con Carolina Varela
- Reyes González Sánchez
- 05/27/2025
Desde Roma, Carolina Varela impulsa proyectos que conectan el arte con el desarrollo social. Como soprano reconocida internacionalmente y Coordinadora Internacional de Progressio Ecuador en Italia, su trabajo fusiona música, diplomacia cultural y promoción de talentos emergentes. En esta conversación, nos comparte su visión sobre el poder transformador de la cultura y su compromiso con el ascenso social a través de las artes.
Desde tu experiencia en Progressio, ¿qué aprendizajes te ha dejado construir puentes entre Ecuador e Italia a través de la diplomacia cultural?
Carolina: he aprendido que hay diversos tipos de puentes, aquellos que se crean para la difusión cultural en la cual los artistas son sobretodo embajadores de la propia cultura; a través de la diplomacia cultural se convierten en guías que permiten descubrir de manera mucho más amplia el alma de una nación que yace en sus
expresiones artísticas.
Luego, están los puentes que contribuyen al crecimiento de los artistas, empezando por los más jóvenes que necesitan obtener las herramientas para mejorar su técnica e interpretación, en muchas ocasiones y según el tipo de actividad artística la posibilidad de acceder a aspectos formativos relevantes son muy limitados en
nuestro país. Así mismo, los artistas más afirmados necesitan ser apoyados para que su talento sea reconocido también en el extranjero.
En ambos casos, si hay algo que he aprendido a tomar en cuenta es que no siempre nuestros artistas tienen conciencia plena de su nivel y de cómo eso afecta al momento de elaborar un plan de acción para su crecimiento profesional.
¿Cómo crees que el acceso y consumo de bienes culturales puede impactar en el ascenso social de las nuevas generaciones?
Carolina: creo que el consumo de bienes culturales entre los jóvenes es una piedra miliar en su formación como ciudadanos de proyección hacia un futuro exitoso, esto conlleva no sólo una mayor apertura mental, espiritual, sensibilidad y conocimiento histórico de los aspectos más íntimos de la humanidad a través del arte sino que también impulsa una sociedad a indagar en profundidad su propia identidad anhelando su difusión y desarrollo.
Como soprano y coordinadora internacional, combinas arte y gestión cultural. ¿Qué habilidades de una faceta enriquecen a la otra en tu día a día?
Carolina: el hecho de vivir al interno del Teatro de la Ópera de Roma me ha permitido conocer, escuchar y trabajar junto a los mejores cantantes de ópera, directores de orquesta, vestuaristas, directores de escena, directores de coro etc del panorama internacional, esto me ayuda a darme cuenta qué es exactamente lo que necesita un artista y su nación para crecer culturalmente y crear proyectos funcionales y eficientes.
Por otro lado, el poder trabajar junto a tantos artistas me ha permitido crear una red de colaboración más amplia en la cual mi contribución como artista ha sido siempre muy apreciada.
¿En qué momento nació en ti la certeza de que “sin cultura no hay progreso”, y cómo se ha reflejado esta idea en tu carrera?
Carolina: desde el primer día que conocí Italia.
Este país posee el más grande patrimonio artístico y cultural de todo el mundo, museos, sitios arqueológicos, obras de arte.
Un país que cuenta con 59 sitios UNESCO y 53 de ellos son bienes culturales. El simple hecho de pasear por sus calles, plazas e iglesias transforma la mente y el espíritu de cualquier persona.
Hace 23 años vine a Italia para conocer aquel lugar maravilloso donde nació la Ópera y donde me habría encantado quedarme a estudiar en uno de sus conservatorios pero al final descubrí mucho más que eso, descubrí “la belleza” en el sentido literal de la palabra y el potencial del hombre de crearla.
Este peregrinaje y todo lo que veo y descubro a diario ha sido muy inspirador, es una guía en cada momento de estudio, en la búsqueda de cada nota, de cada palabra, de cada frase y efecto de mi canto, es la conciencia de que gracias a mi voz y la Ópera, una manifestación artística que se renueva en cada interpretación, hay el deseo de llegar a esa perfección que conmueve el alma de la humanidad.
Esto ha transformado mi vida y la de muchas personas. Ver niños y jóvenes tocando juntos en una orquesta o cantando en un coro persiguiendo un objetivo común, transformándose en una voz sola es un ideal que tiene mucho que enseñarle a una sociedad que desee alcanzar un desarrollo profundo y verdadero.
En tus presentaciones en Italia, siempre llevas un mensaje de identidad ecuatoriana. ¿Qué valores o símbolos de Ecuador procuras resaltar ante el público internacional?
Carolina: la difusión de la música del Ecuador ha sido uno de los más grandes objetivos desde los inicios de mi carrera.
Seguramente uno de los momentos más importantes de este proceso se cumplió el 24 de mayo del año pasado cuando por primera vez se presentó una Ópera Ecuatoriana en Italia.
Fue el estreno europeo de la operetta “Ensueños de Amor” de Luis H. Salgado en el Teatro de Villa Torlonia en Roma, vinieron algunos de los más importantes cantantes líricos ecuatorianos para la ocasión. La dirección escénica fue de Javier Andrade Cordoba, el principal estudioso y difusor de la obra de Luis H. Salgado, el vestuario fue de Lorena Villacis y la dirección musical del pianista Andrés Torres.
Fue un proyecto complejo y ambicioso que nos regaló mucho como artistas y ecuatorianos, pudimos mostrar nuestro talento, nuestra música y llenarnos de orgullo, el poder decirle a Italia: “Ecuador también tiene su Opera” firmada por aquel que considero el más grande genio musical de nuestro país: Luis Humberto Salgado, un compositor que nos dejó un legado inmenso y completamente por descubrir y difundir aún. Un hombre que en su inimitable y prolífica creación refleja su identidad y resiliencia, valores que caracterizan a todos los ecuatorianos.
Siempre en honor de Salgado, hemos llevado de gira por Europa el proyecto “Salgado Lírico” con las piezas más importantes de las óperas del Maestro, gracias a
obras como Cumandà no es difícil transportarse en la vastedad de la Amazonia ecuatoriana, sus colores, sus aromas y sus encantos. Un proyecto que esperamos pueda encontrar el apoyo que merece para su difusión en más latitudes porque es uno de los que mejor representa nuestra cultura a 360º.
¿Cuál ha sido el mayor desafío de impulsar proyectos de diplomacia cultural en tiempos en que la cultura suele verse como algo secundario?
Carolina: seguramente la falta de apoyo económico en ámbito público y privado es un gran obstáculo, poder presentar proyectos de un cierto nivel que nos representen dignamente requiere la participación de profesionales que para prepararse requieren ser remunerados.
Lo mismo sucede si deseamos desarrollar proyectos de formación, hay momentos en los que los artistas participan a título de beneficencia porque creen en el proyecto y su importancia pero esto no constituye una regla general y cada artista merece ser reconocido por su trabajo.
Lamentablemente muchas autoridades no entienden que los artistas invierten mucho en su formación y para alcanzar un cierto nivel dedican todo el tiempo y sacrificios posibles, sobretodo cuando se trata de formación en Europa donde encontrar becas de arte es casi imposible, los costos de academias, conservatorios y clases privadas son realmente altos y a esto se suma el altísimo costo de la vida constituyendo un enorme límite para los artistas que anhelan crecer profesionalmente.
Además de tu carrera artística, colaboras como voluntaria en Progressio. ¿Qué te motivó a ofrecer tu tiempo y talento de forma voluntaria, y qué impacto personal ha tenido esta labor en ti?
Carolina: como comenté anteriormente mi peregrinaje en Europa ha sido largo y complejo, lleno de grandes desafíos, obstáculos pero también de satisfacciones inmensas que jamás imaginé alcanzar.
Llegué a Italia muy joven, tenía solo 19 años y todo fue un constante descubrimiento porque sobretodo en ese entonces tener acceso a información era mucho más difícil, sobretodo tratándose de algo tan específico y cerrado como el Canto lírico, reconozco que a esa edad fue de fundamental importancia la ayuda y consejo de personas que fui encontrando en mi camino.
Considero importante crear un círculo virtuoso de colaboración y restitución de lo bueno que he recibido en estos años. Los jóvenes, necesitan ser guiados y aconsejados de la mejor manera, para mi es importante que sepan que en mi pueden encontrar un punto de referencia y apoyo.
Desde tu perspectiva, ¿qué rol puede desempeñar Progressio en la democratización del acceso al arte lírico y a otras expresiones culturales en América Latina?
Carolina: Progressio se está distinguiendo por el apoyo a la difusión de la cultura y artistas ecuatorianos en Europa, ha protagonizado los proyectos anteriormente mencionados.
En su corta vida ha desarrollado una importante red de apoyo dentro y fuera de Ecuador y en repetidas ocasiones hemos conversado con algunos voluntarios sobre la potencialidad que tiene la cultura de fundirse con otros ámbitos como el turismo, la gastronomía, la fotografía creando proyectos innovadores que permitan el acceso de un público más amplio a esos procesos de los cuales se pueden obtener beneficios de largo alcance.
Participaste recientemente en el cortometraje Compagni di Viaggio de Ferzan Ozpetek. ¿Cómo viviste la fusión de música, cine y construcción de identidad en ese proyecto?
Carolina: sin duda una experiencia inolvidable que me permitió no sólo colaborar con uno de los más reconocidos directores cinematográficos en Europa sino también poder contribuir con mi imagen y mi voz. Un privilegio, ser una pieza al interno de una obra maestra que en 15” muestra la esencia de la excelencia italiana.
Descubrir de cerca el nacimiento de un mosaico tan refinado donde cada pequeño elemento encaja a la perfección para crear una armonía única. Presenciar un proceso creativo de este nivel deja una huella importante en mi recorrido artístico.
Para cerrar, ¿qué nuevos proyectos artísticos o de cooperación cultural te entusiasman de cara al futuro cercano?
Carolina: junto a los compañeros de Progressio tenemos un par de proyectos muy complejos y ambiciosos decantándose desde hace algún tiempo, esperamos poder encontrar pronto el apoyo económico que necesitan pero por el momento no quisiera arruinar la sorpresa.
Sin duda alguna, mi empeño principal es con las nuevas generaciones de artistas, impulsar su formación y reconocimiento es algo que tengo siempre presente, desearía crear un portal a través de la página de Progressio para poder tener un espacio de colaboración para compartir información, inquietudes e intercambio de experiencias.
En un mundo que muchas veces prioriza lo inmediato, Carolina Varela nos devuelve la fe en lo esencial: en la belleza, en el rigor del arte, en la memoria de nuestras raíces y en el poder del talento como vehículo de transformación. Su recorrido como soprano y gestora cultural no solo enaltece la identidad ecuatoriana en Europa, sino que construye puentes para que las nuevas generaciones encuentren en la cultura no solo un destino, sino un derecho.
Desde Progressio Ecuador reconocemos en Carolina no solo una artista excepcional, sino una aliada incansable en la tarea de democratizar el acceso al arte, dignificar la formación artística y tejer redes de cooperación desde la sensibilidad, la excelencia y el compromiso.
Su voz trasciende escenarios. Es una voz que guía, inspira y recuerda que sin cultura no hay progreso, y sin artistas comprometidos como ella, no hay transformación duradera.